viernes, 15 de mayo de 2020

Resumen: Uso de Cannabis medicinal (Cannabidiol) en Epilepsia por Complejo de Esclerosis Tuberosa (CET) en México.

Estudio observacional, descriptivo transversal.
Dr. Carlos G. Aguirre Velázquez.

Resumen

Se exploró a través de una encuesta estructurada online la experiencia de los padres y pacientes con el uso de Cannabis medicinal o Cannabidiol (CBD) en epilepsia secundaria a Complejo de Esclerosis Tuberosa(CET) en México. Se obtuvieron 105 entradas a la encuesta, se reportan 58 casos que llenan los criterios de inclusión. Cuarenta y siete (47) niños y adolescentes de 5 meses a 18 años de edad y once (11) adultos de mayores de 18 años. La distribución por sexo es de 52% masculino y 48% femenino. Presentan algún síndrome epiléptico 70.6%: Síndrome de Lennox-Gastaut (SLG) 20,

Síndrome de West (SW) 20 y 6 Epilepsia Mioclónico-Astática (EMA). Con diagnóstico de Epilepsia

Refractaria (ER) en 22 (38%). El 78% reciben polifarmacia con más de 2 anticonvulsivos. Reciben tratamiento con Cannabis medicinal 10 casos (17.2%). Se reporta con CBD disminución de las crisis en 7 (70%) casos; de forma moderada a importante en 6 (60%), discreta 1, sin cambios 1 y ningún caso libre de crisis o con aumento de las crisis. No se reportaron eventos adversos graves, en 4 casos (40%) fueron leves con aumento del apetito y alteraciones del sueño. Los padres reportan mejoría en los parámetros de calidad de vida; estado emocional, cognición, sueño y alimentación.

Palabras clave: Epilepsia, Esclerosis tuberosa, Cannabis medicinal, Cannabidiol.

Introducción

El Complejo de Esclerosis Tuberosa (CET) es un síndrome neurocutáneo autosómico dominante de expresión variable con afectación multisistémica; donde la piel, el cerebro, ojos, riñones y corazón son comúnmente afectado por hamartomatósis, malformaciones o lesiones tumorales. La incidencia es de 1:9400 a 10,000 nacimientos. Hay mutaciones en los genes TSC1 Cr9 y TSC2 Cr16 que sintetizan las proteínas hamartina y tuberina que actúan como supresores de tumorales en el sistema de Rapamicina mTOR. Las crisis convulsivas son el síntoma neurológico más común del CET en el 85%, las crisis son refractarias a los anticonvulsivos en un 63% (Morton, 2008). El tipo generalizado es el más frecuente con espasmos infantiles en el 68% de casos en la infancia. También puede presentarse crisis tónicas, atónicas y ausencias atípicas, especialmente en pacientes con patrón de complejos paroxísticos lentos de punta-onda lenta ≤2.5 Hz en el EEG lo que constituye el Síndrome de Lennox-Gastaut (SLG) (Pellock, Dodson, & Bourgeois, 2008). Las crisis tónico-clónicas generalizadas remplazan a las anteriores crisis al avanzar la edad y suele haber gran variabilidad en el patrón convulsivo (Franz, 1998).

Se han propuesto varios mecanismos por los cuales el CBD puede tener efectos anticonvulsivos (Wetly, Luebke y Gidal, 2014). La capacidad del CBD para bloquear la vía mTOR y las propiedades antioxidantes y anti-inflamatorias resultan de gran interés como un nuevo tratamiento potencial para CET y la epilepsia refractaria (Chesher and Jackson, 1974). En México desde hace varios años hay un movimiento de padres y pacientes con epilepsia que solicitan estos tratamientos y muchos ya utilizan algunos de estos productos de CBD.

Hussain, Zhou y Jacobson (2015) en una encuesta a 117 padres de niños con epilepsia refractaria por SLG y Espasmos Infantiles reportan mejoría en un tiempo promedio de tratamiento de 6,8 meses, con una dosis promedio de 4,3mg/kg/día de CBD. Devinsky, Marsh y Friedman (2016) publican el resultado del primer ensayo clínico abierto prospectivo y multicéntrico con el uso de un producto farmacéutico (Epidiolex®) a base de un cannabinoide – 99% Cannabidiol (CBD) en 162 niños con epilepsia refractaria, en este estudio se reportó una reducción media de las crisis motoras de 36.5% y un adecuado perfil de seguridad. Hess, Moody y Geffrey (2016) en un protocolo de acceso ampliado utilizaron CBD como tratamiento adjunto en pacientes con epilepsia resistente a fármacos y secundaria a CET. La tasa de respuesta fue del 50% a los 3 meses de tratamiento y una reducción media del 48,8% en la frecuencia de las crisis convulsivas. No hay estudios controlados publicados en nuestro país acerca de la efectividad y seguridad del uso de la Cannabis medicinal (CBD) en epilepsia o CET.

Recientemente (Aguirre-Velázquez, 2017) publica el primer estudio observacional sobre el uso del cannabis medicinal en México en 43 casos de epilepsia refractaria pediátrica. Los padres reportaron mejoría en el 81% en la frecuencia, intensidad y duración de las crisis y en parámetros de la calidad de vida. En este estudio hay 3 casos de Complejo de Esclerosis Tuberosa y epilepsia refractaria que utilizaban alguna forma de Cannabis medicinal. El propósito de este trabajo es describir la experiencia de padres y pacientes con el uso del CBD en la epilepsia secundaria a CET en nuestro país.

Metodología

Se realizó una encuesta online que exploró la experiencia de los padres y pacientes con el uso de cannabidiol (Cannabis medicinal) en niños y adultos con epilepsia secundaria a Complejo de Esclerosis Tuberosa (CET) en México. Se utilizó un software comercial en línea SurveyMonkey® (www.surveymonkey.com), adquiriendo una licencia con opciones para elaborar preguntas sin límite de diversos tipos; abiertas, cerradas, opción múltiple y con filtros en un paquete de invitaciones por email y/o links para redes sociales o páginas web. El sistema capta las respuestas individuales y elabora automáticamente un reporte con estadísticas básicas. La información se almacena bajo normas de seguridad en SuperNAP e InterNAP ®.

La encuesta se diseñó con 35 preguntas y 1 opinión abierta en 3 secciones. Se incluyó al inicio una cláusula de consentimiento informado y confidencialidad para los datos personales solicitando la aceptación. Las secciones fueron: 1) Datos personales. 2) Información de esclerosis tuberosa. 3) Información sobre epilepsia y su tratamiento.

La encuesta se distribuyó durante 30 días, Abril 14 a Mayo 14 del 2017, a padres de niños y pacientes en 4 grupos de Facebook- 1) Asociación POR GRACE A.C., dedicada a compartir información sobre el uso de cannabis medicinal para tratar las convulsiones de sus hijos. 2) Asociación Mexicana de Esclerosis Tuberosa A.C., grupo de padres y pacientes de CET. 3) Bienvenido a Holanda, grupo de padres para difusión de cannabis medicinal en epilepsia. 4) NPI Neurología y Psicología Integral, página de grupo médico privado. Los criterios de la invitación fueron: 1) Diagnóstico de complejo de esclerosis tuberosa y epilepsia en tratamiento. La participación fue voluntaria y por autoselección. Los criterios de inclusión fueron: Niños, adolescentes o adultos de ambos sexos con diagnóstico confirmado de CET por criterios clínicos y/o estudios de laboratorio, imagen, genéticos o biopsia de lesiones. Residencia en México. Los criterios de exclusión fueron; casos sin diagnóstico de CET y/o sin crisis convulsivas y encuestas incompletas. No se incluyeron casos de residentes en otros países fuera de México.

Se obtuvo un reporte automatizado de toda la información de 104 encuestas quedando 58 encuestas para su análisis. Se utilizó paquete de Excel® 2013 para obtener datos estadísticos con medidas de tendencia central, datos absolutos y porcentuales para generar tablas y gráficas.

Resultados

Se analizaron 58 encuestas, las edades del grupo variaron en un rango de 2.4 a 29 años, con una media de 9.9 años y D.E. de 7.1 años. Hubo un discreto predominio de del sexo masculino (52%) en este grupo, el 10.3% tuvieron antecedentes heredofamiliares para CET. El diagnóstico de CET se realizó con mayor frecuencia en la etapa de lactantes (0 a 2 años) en el 58.6% por diferentes métodos, diversos especialistas y centros de atención; 75.8% tuvieron estudios de imagen y EEG, sólo por criterios de historia clínica 10.3%. La confirmación genética por TSC1 y TSC2 en 6 casos (10.3%) y 2 (3.4%) por biopsia de lesiones.

El inicio de la epilepsia predominó en el rango de recién nacido hasta los 2 años (70%), se estableció el diagnóstico de algún síndrome epiléptico en 36 casos (72.7%) y algunos casos reportaron varios síndromes epilépticos en su evolución. Se declararon con epilepsia refractaria el 38% de casos.

Las crisis convulsivas predominantes fueron las generalizadas en un 63.6% de tipo; mioclónicas, atónicas, tónicas y tónico-clónicas, seguidas por las ausencias atípicas y espasmos infantiles. Las crisis focales se reportaron en 20.7%, casos con crisis mixtas 15.5%. Recibieron polifarmacia de 3 hasta 8 anticonvulsivos 34 (68%) y más de 10 anticonvulsivos 4 (8%).

Los casos con tratamiento de Cannabis medicinal (Cannabidiol) fueron 10, el producto más utilizado fue el RSHO-X en 6 casos, 2 producto artesanal, 1 Gummy CBD y 1 Nanko.

Los resultados indican una disminución de las convulsiones en el 60% de los casos en forma importante (80-100%). No se reportaron casos libres de crisis ni de agravación con CBD. Las dosis de CBD variaron de 0.7 a 19 mg/Kg/día ( =4.1 mg/Kg/día), en los productos artesanales no es posible obtener una posología. Se presentaron efectos adversos leves.

Los padres reportan cambios en los parámetros de calidad de vida con el tratamiento de Cannabis medicinal (CBD).

Conclusiones

La experiencia de los padres y pacientes con el uso del Cannabis medicinal (CBD) es positiva por tener una mejoría en la frecuencia, intensidad y duración de las crisis convulsivas secundarias a CET. Así mismo reportan una mejoría en parámetros generales de calidad de vida. Este recurso terapéutico ya está disponible en nuestro país y con un costo moderado en relación a otros tratamientos. Se requieren estudios controlados con mayor solidez estadística que apoyen el uso del Cannabidiol (Cannabis medicinal) en la epilepsia secundaria a CET.

Si desea consultar el estudio completo en su versión en inglés, pueden hacerlo en el siguiente enlace:
http://www.journalrepository.org/media/journals/JAMMR_64/2017/Oct/Velazquez23122017JAMMR36585.pdf

domingo, 10 de mayo de 2020

Cannabis shows promise blocking coronavirus infection: Alberta researcher

Author of the article: Bill Kaufmann


University of Lethbridge researcher Igor Kovalchuk is leading a study on medical cannabis as a potential therapy for COVID-19. SUMMITED PHOTO

Cannabis extracts are showing potential in making people more resistant to the novel coronavirus, says an Alberta researcher leading a study.

After sifting through 400 cannabis strains, researchers at the University of Lethbridge are concentrating on about a dozen that show promising results in ensuring less fertile ground for the potentially lethal virus to take root, said biological scientist Dr. Igor Kovalchuk.

“A number of them have reduced the number of these (virus) receptors by 73 per cent, the chance of it getting in is much lower,” said Kovalchuk.

“If they can reduce the number of receptors, there’s much less chance of getting infected.”

Employing cannabis sativa strains over the past three months, the researcher said the effective balance between cannabis components THC and CBD — the latter more typically associated with medical use — is still unclear in blocking the novel coronavirus.

“It will take a long time to find what the active ingredient is — there may be many,” said Kovalchuk, whose Pathway RX is owned partly by Olds-based licensed cannabis producer Sundial Growers and partnered with Alberta cannabis researcher Swysh.

But it’s generally the anti-inflammatory properties of high-CBD content that have shown most promise, he added.

“We focus more on the higher CBD because people can take higher doses and not be impaired,” said Kovalchuk.

The study under Health Canada licence using artificial human 3-D tissue models has been seeking ways to hinder the highly contagious novel coronavirus from finding a host in the lungs, intestines, and oral cavity.

If successful, the work could find practical medical use in the form of mouth wash, gargle, inhalants or gel caps, said Kovalchuk.

“It would be cheaper for people and have a lot less side-effects,” he said.

But the absence of clinical trials remains a barrier, and funding from an increasingly cash-strapped cannabis industry isn’t there to fuel that, said Kovalchuk.

“We have clinicians who are willing to work with us but for a lot of companies in the cannabis business, it’s significant cash that they can’t afford,” he said.

The scientist emphasized the findings wouldn’t lead to a vaccine — something “less specific and precise” but nonetheless another possible weapon against COVID-19.

“The extracts of our most successful and novel high CBD C sativa lines, pending further investigation, may become a useful and safe addition to the treatment of COVID-19 as an adjunct therapy,” said Kovalchuk.

“Given the current dire and rapidly evolving epidemiological situation, every possible therapeutic opportunity and avenue must be considered.”

Israeli researchers have begun clinical trials of CBD as a treatment to repair cells damaged by COVID-19 by using its anti-inflammatory abilities.

It’s thought CBD could enhance the traditional effect of steroids in such treatment of patients in life-threatening condition and also bolster the immune system.

It’s the kind of research and his own that deserves government support in Canada, whose federal government has pledged $1.1 billion in funding for COVID-19 research said the U of L scientist.

“Our work could have a huge influence — there aren’t many drugs that have the potential of reducing infection by 70 to 80 per cent,” he said.
BKaufmann@postmedia.com
Twitter: @BillKaufmannjrn

miércoles, 6 de mayo de 2020

Abejas y cannabis, una relación mas que interesante


La naturaleza es sabia y un ejemplo claro es la relación existente entre las abejas, el cáñamo y la cannabis. Aunque pareciese una relación “reciente” la realidad es que este intercambio natural a existido desde el inicio de los tiempos, y es hasta ahora que los investigadores comienzan a enfocar su mirada en dichos elementos de la naturaleza en conjunto.

A través de diversas investigaciones científicas como la de Colton O’Brien, Nicolas Trainer, o Sarah Brittany Somerset se ha estudiado cómo las abejas pueden interactuar de diversas maneras tanto con el cáñamo, como con la cannabis de diversas maneras como a continuación explicaremos.

En el caso del primero EL CÁÑAMO Y LAS ABEJAS.

Un investigador en Colorado descubrió en el año 2018 que las abejas visitan campos de cáñamo aparentemente utilizando las plantas como fuente de polen durante los últimos meses del verano.

En un documento presentado en noviembre del 2018 en una conferencia de entomología en Vancouver, Columbia Británica, Colton O’Brien, un estudiante de la Universidad Estatal de Colorado, informó que representantes de 23 especies de abejas o habían sido atrapados en trampas en los campos de cáñamo durante una semana durante un experimento del mes de agosto.

Para descubrir por qué, O’Brien realizo el estudio en dos granjas experimentales de cáñamo en el norte de Colorado, donde la planta florece entre finales de julio y principios de septiembre. La floración cae durante un tiempo en que otros cultivos han completado sus períodos de floración, lo que genera una falta de fuentes nutricionales para polinizadores como las abejas.

Esto puede hacer que las abejas se estresen cuando intentan encontrar fuentes de polen ya que lo necesitan para alimentar a sus crías.

Es ahí donde entra el cáñamo. Si bien estas plantas no producen néctar, sí generan una gran cantidad de polen. “Por lo tanto, el cáñamo se convierte en una valiosa fuente de polen para las abejas que se alimentan, lo que le da el potencial de tener un fuerte valor ecológico”, señala el informe.

O’Brien y su equipo recomendaron implementar mejores políticas de control de plagas para el cáñamo, dada su importancia potencial para mantener la salud de las abejas, un área de preocupación entre miles de investigadores de todo el mundo.

Pero cuando se trata de abejas que ayudan con el cannabis, las cosas se ponen más raras que eso.

Segundo, CANNABIS Y ABEJAS.

En 2016 un apicultor francés entrenó abejas para hacer miel con la resina de la planta de cannabis, según Science Explorer. Nicolas Trainer, un defensor de la marihuana que ha usado la variante medicinal para lidiar con la hiperactividad desde que era un niño, se interesó en combinar los beneficios para la salud de la miel con los del cannabis.

Con el tiempo, entrenó a algunas de sus abejas para recolectar resina del cannabis y usarla en su colmena. Finalmente, las abejas usaron la resina e hicieron lo que él llama “cannahoney”. Él cree que el cannahoney podría ser mejor que otros productos de marihuana. “Todo lo que pasa a través del cuerpo de una abeja ha mejorado”, dijo a Science Explorer.

Esa es la misma postura que está tomando PhytoPharma, una compañía israelí que ha desarrollado lo que llama “cannabeez”. Según un artículo reciente de Sarah Brittany Somerset en Forbes, las abejas reciben una cantidad baja de cannabidiols y luego producen miel que contiene CDB infundida.

Según la empresa, el producto ofrece alivio para el dolor, ayuda a dormir y alivia el estrés y la ansiedad sin los “efectos intoxicantes o interferencias químicas”.

CONCLUSIÓN: sin duda, una vez más queda claro lo fascinante que puede resultar la naturaleza en conjunto, donde ningún elemento resulta insignificante y por el contrario forma parte de un todo en conjunto. En el caso de las abejas, animales maravillosos, cuyo papel en el medio ambiente es fundamental, su labor de polinización es insustituible. Sin polinizadores un tercio de nuestra alimentación desaparecería, y lo que es aún más grave, también lo haría parte del forraje que alimenta a los ganados que comemos.

FUENTE: https://www.entrepreneur.com/article/324936
https://www.adalmo.es/noticias/sin-abejas-no-habria-vida/